19 de agosto de 2009

Mitillus galloprovincialis


Pero estos sí son cultivados. Ya decía yo que no veía ni medio en mis baños veraniegos.
¡Qué dura es la vida del currante en agosto!

Aristeus antennatus

Ultimamente me preguntaba si realmente eran salvajes. Buscando por ahí he encontrado este texto y como con el calor estoy muy perezosa pues voy y lo cuelgo.



Las fuertes corrientes marinas que se forman en el Cap de Creus hacen descender a las gambas hasta 2.000 metros de profundidad, donde las redes de los pescadores no las pueden alcanzar. Hay que tener en cuenta que las capturas se realizan a un máximo de 800 metros.
Estas enormes cascadas marinas tienen también su parte positiva. Las corrientes arrastran además nutrientes para las gambas: pequeños gusanos y moluscos. Este alimento garantiza la supervivencia de la especie y una enorme reproducción. Dos o tres años después vuelven a subir y entonces los caladeros se vuelven a llenar y la pesca es muy abundante,

Las cascadas que atraviesan los cañones --grandes valles submarinos-- del Cap de Creus, Palamós y Blanes, se forman cada seis o diez años dependiendo del clima. Normalmente, se dan en años fríos, ventosos y secos. El viento enfría la superficie del mar en el Cap de Creus, el agua se vuelve densa y, al descender, forma grandes corrientes submarinas que circulan a elevadas velocidades.