21 de julio de 2009

Risotada atávica (o de chaquetas fantasía)


Hace un rato he leído en el blog de Cris F sobre la necesidad imperiosa que algunos tienen (tenemos) de sentirse comprometidos con algo. Le comentaba que quizás la necesidad de compromiso era uno de nuestros rasgos esenciales en tanto que especie sintiente (lo de especie pensante es sólo una mera verbalización y estructuración de lo anterior). Ya escribí aquí sobre el miedo atávico y otras emociones fuertemente ancladas en nuestro esqueleto psicológico. Miedo, compromiso, acecho, vigilancia, caza, odio, amor...y ahora añado el de la necesidad de burla, escarnio y risotada fácil. Al ser humano le encanta la burla. La burla es la base del 99% de los mejores chistes y de los mejores gags de las sitcoms. Dependiendo del tipo y grado de educación y pedantería uno puede llegar a burlarse más o menos de algo o alguien, pero cuando encuentra un objetivo a su medida no hay pudor que lo pueda frenar; las riendas van sueltas, pero que muy sueltas y el sarcasmo galopa a todo trapo.

Yo (y unos cuantos millones más) encontré mi objetivo hace tiempo en los esperpénticos personajes del PP. Me cuesta verlos como seres de carne y hueso, me parecen muñecos esquizofrénicos escapados de los spitting image o del guiñol. Sonrisas desencajadas, ojos estrábicos, narices permanentemente hinchadas, cuellos estirados, hombros rígidos, barbillas en tensión, pelos siempre estáticos a lo Richard Widmarck, etc.

La prensa me proporciona, día sí día no, suculentas fotos del ex jefe en pleno histrionismo descontrolado y las apariciones en televisión de Barberá arrollando en los pasillos de Valencia no tienen desperdicio, pero todavía estoy esperando una imagen que valdría su peso en diamantes: la de Camps embutido en su chaqueta fantasía. ¿Por qué nadie ha hecho hincapié en ese jugoso detalle? Se le acusa de haber recibido varios trajes y una chaqueta fantasía. ¡Por favor! ¡Queremos verla! ¡Queremos regocijarnos! ¿Es blanca de marinerito?, ¿con lentejuelas?, ¿de un rojo osado?, ¿bordada?

El verano es largo y las noticias tediosas, a ver si alguien se anima y tira de la madeja...Yo, si me ofrecen esa imagen, prometo tirarme del sofá.